A través de túneles, que le permitían conectarse a siete casas diferentes, y usando los ductos del drenaje, Joaquín “El Chapo” Guzmán permanecía prófugo en la ciudad de Mazatlán, Sinaloa, hasta la madrugada de este sábado 22 de febrero.
Según explicó el procurador General de la República, Jesús Murillo Káram, la detención del líder del Cártel de Sinaloa se logró de forma impecable, sin emitir un solo disparo y sin un solo herido.
La detención “fue producto de una operación trabajada durante varios meses en una coordinación plena entre todas las instancias del gobierno federal. Fue impecablemente lograda por los elementos de la Secretaría de Marina”, dijo el funcionario en rueda de prensa efectuada en el hangar presidencial.
“El Chapo”, agregó, fue detenido junto con un colaborador y en la operación, que se prolongó por meses, también se aseguraron 87 armas largas, 26 cortas y 49 vehículos, 19 de ellos blindados, así como 4 ranchos y 16 casas.
Todo se efectuó con “enorme eficiencia y sin un solo disparo, no hubo un solo daño u no hubo ningún perjudicado”, agregó.
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